Por: Msc. Beatriz Espina / @Orientaconducta

La sexualidad humana, es parte de la vida, tan importante dentro de las necesidades básicas como dormir, comer, o distraerse. Sin embargo, cada persona prioriza su placer sexual de acuerdo a las creencias, valores y cultura que tenga. Eso le hace elegir pareja sexual, buscando precisamente la similitud entre estas variables.

Si mi mente dice que es una prioridad tener sexo a diario (vas a buscar una pareja sexualmente activa).
Si mis valores dicen que el sexo es después del matrimonio ( vas a buscar una pareja conservadora).
Si mis creencias dicen que el sexo es pecado (no vas a buscar nada y cada vez que pienses en sexo te vas a sentir culpable).

Si mi cultura me dice que tener sexo es sano y normal (vas a buscar una persona que tenga la misma cultura que tu).

Entonces, ¿qué pasa?:
Que buscamos todo al revés. Porque inconscientemente nos colocamos retos sexuales para poder salir de nuestra zona de confort. Muchos de esos retos traen consigo la frustración, el matrimonio o el divorcio. Todo va a depender de la adaptabilidad de la pareja.

Ahora, conociendo las variables comunes de la sexualidad enmarcada en la elección de pareja, podemos agregar: La migración.

La migración, como todos lo sabemos, es un proceso confuso, ansioso, y requiere de mucha capacidad de resiliencia para contar con la adaptabilidad necesaria. Las funciones mentales se encargan más de priorizar la estabilidad como: conseguir donde vivir, conseguir ser legal, conseguir un empleo, conseguir ayudar a mi familia, conseguir comprarme algo de ropa porque el clima no es el mismo, conseguir, conseguir y conseguir.

Sucede un fenómeno:
La pareja pasa a un segundo plano y la sexualidad también.
La palabra más expresada del migrante es: “no me da tiempo de tener intimidad”
La sexualidad en la migración se ha vuelto un caos.

1. Quien dejó a su pareja en otro país, comienza a sufrir de celos y desconfianza.
2. Quien no tiene pareja, comienza a sufrir porque tampoco tiene tiempo para buscarla.
3. Quienes emigraron juntos, no tienen intimidad porque posiblemente no viven solos y tampoco les sobra el tiempo.
4. Quienes aman los retos, buscaran tener varios encuentros sexuales casuales y luego sentir soledad por no poder consolidad una relación estable.

¿Qué hacer?:
Si bien recordamos el primer párrafo que indica que la sexualidad es una PRIORIDAD, sea cual sea tu caso. Te dejare varios consejos para que los puedas aplicar en tu vida íntima:

• El auto ejercicio de la función sexual, te ayudara a generar neurotransmisores encargados del placer y la tranquilidad, por lo menos dos veces a la semanas te debes explorar y ubicar el placer. Sacar 15 minutos mínimo no cuesta nada.
• Si no tienes pareja, procura rodearte de un circulo de personas externas a tu trabajo ( pues no es sano unirte al jefe, o un compañero de oficina) después vienen las consecuencias.
• Si tienes pareja , ambos deben reunir una tarifa mensual para ir a un hotel y tener un encuentro amatorio de alto placer, y otros días tener intimidad en las medidas de sus posibilidades.
• Si tu pareja sexual se encuentra en otro país, deben tener recursos como música, juguetes sexuales y organización para tener intimidad por web. Sexting, comprendiendo que el tiempo de separación mayor de una pareja sexualmente activa es de 3 a 5 meses, superior a ello hay niveles de riesgo en la relación.
  Es importante recalcar, que como el ser humano le atraen los riesgos o los nuevos retos. Le resultará muy atractivo tener a una nueva pareja sexual extranjera. Con otra cultura, creencias y valores.
  Cuando esto sucede, al principio puede ser muy color de rosa, el migrante ve en ese extranjero una posibilidad mayor de adaptabilidad al sistema y el extranjero le atrae el calor del caribe que se lleva en la sangre.
  Ambos pueden funcionar muy bien durante un par de meses, pero al tornarse más seria la relación. Cada uno comenzara a presentar hoques culturales, creencias y normas. Hay parejas donde se saben adaptar con altos niveles de comunicación y amor, hay otras que por el contrario deciden alejarse.
  Para el extranjero no es fácil tener una pareja que tenga su corazón en otro país.
  
• Para el migrante no es fácil tener a una pareja que se queje de todo, aun cuando lo tiene todo.
  
• Para el extranjero no es fácil tener que adaptar su comunicación para ser comprendido.
  
• Para el migrante no es fácil tener que explicar ciertas maneras de actuar para no tener problemas. Por ejemplo el venezolano acostumbra a decir: “mi amor, mi cielo. Mi vida” y eso el extranjero lo mal interpreta causando desconfianza y celos en la relación.

Para el extranjero y para el migrante, armar una nueva relación de pareja, requiere de que ambos conozcan la cultura de cada uno, que ninguno haga desprecio sobre la misma, se debe trabajar la aceptación del esquema de personalidad de cada uno y divertirse de las diferencias, disfrutar el compartir de cosas nuevas, para que pueda funcionar la relación, y luego llevar todo ese aprendizaje a la cama, a la vida y al amor.

En líneas generales, se puede concluir que la sexualidad en la migración es ADAPTATIVA y cada persona debe estar consciente de la misma, integrada a los procesos y a la vez, priorizando el placer indistintamente de cual sea tu caso.
Porque hay una sola verdad aquí, es tu cuerpo, es tu autoestima, es tu sexualidad. Eres tú el responsable.

No dejes que la migración apague tu libido sexual. Si tienes pareja a distancia o cerca. No dejes perder a la persona que amas, valora y luchen juntos. Si eres soltero(a) no dejes que por falta de tiempo no consigas pareja, no dejes de conocer nuevas culturas, no dejes de vivir con tus valores y creencias. Y para todos: no dejes de priorizar tu sexualidad, hazlo de manera sana y responsable.
Siempre sé feliz.